Tornillería
EL TORNILLO AUTOPERFORANTE ROTHOBLAAS
Detalles técnicos y geométricos garantizan calidad y rendimiento.
1. PUNTA AUTOPERFORANTE: la punta autoperforante se caracteriza por una geometría afilada y puntiaguda (llamada “sharp”) con una rosca a sacacorchos que llega hasta el final y garantiza un agarre inicial rápido y potente.
2. MUESCADO: En los tornillos de longitud superior a 50 mm, la punta autoperforante tiene una muesca retraída que facilita el corte de las fibras durante el atornillado y reduce el riesgo de roturas en la madera. La posición retraída de la muesca es fundamental para garantizar una buena capacidad de agarre y perforación de la punta.
3. ROSCADO: El paso de rosca está calibrado en función del diámetro y de la longitud del tornillo: una rosca de paso rápido es ideal en los tornillos largos para reducir el tiempo de atornillado, mientras una
rosca de paso lento es ideal en pequeños tornillos para garantizar precisión al final del atornillado.
4. FRESA: la geometría de la fresa está especialmente diseñada para ampliar las fibras de la madera y quitar las virutas generadas por el avance del tornillo.
La fresa crea espacio para el paso del vástago y limita el sobrecalentamiento del tornillo.
5. CUELLO: un encerado especial recubre el cuello liso (vástago liso) y reduce la fricción en un 30% durante el atornillado.
6. BAJO CABEZA: los avellanadores (llamados “ribs”) se caracterizan por un molde muy afilado apto a cortar las virutas que salen del agujero después de la perforación de la madera.
7. CABEZA: El nombre y la longitud grabados en la cabeza garantizan la trazabilidad y permitin el reconocimiento y la verificación del tornillo también durante la fase de construcción.
